La nueva Xbox One llegará para finales de 2013, aproximadamente para el mes de noviembre.
La consola contará especificaciones muy parecidas, casi iguales, a las que tendrá su rival directo, la PS4. Comenzando con el procesador, cuya arquitectura es de 64 bits componiéndose por 8 núcleos y su memoria RAM de un total de 8 GB. Posee un disco duro de 500 GB, lectora de Blu-ray, puertos HDMI y USB 3.0, y conexión 802.11N Wireless con Wi-Fi Direct, entre otros.
La Xbox One será vendida a 500 dólares en Estados Unidos, a 500 euros en Europa y a 429 libras en el Reino Unido, según se informó. En resumen, será más cara que la PS4.
La nueva Xbox One no sólo será una máquina de juegos, sino que está diseñada para ser utilizada con Skype y posee un soporte televisivo con un Kinect mejorado, entre otras cosas.
Para aquellos que no saben, el Kinect permitirá identificar movimiento y voz del usuario, para poder accionar comandos en la consola mediante lenguaje natural.
La nueva opción de snap mode nos permitirá dividir la pantalla para por ejemplo, mantener una videoconferencia por Skype mientras jugamos un juego, o manejamos el Internet Explorer, que es el navegador soportado.
Otro punto a tener en cuenta es la conectividad entre dispositivos como smartphones o tablets, mediante la tecnología SmartGlass, lo cual permitirá que estos interactúen con la consola.